Citigroup, la mayor empresa financiera del mundo, perdió la batalla judicial para recuperar más de 500 millones de dólares transferidos por error a prestamistas de Revlon
De acuerdo al dictamen emitido por un juez federal en Estados Unidos, la financiera no podrá recuperar los 504 millones de dólares de su propio dinero, los cuales transfirió accidentalmente a acreedores del fabricante de cosméticos Revlon en agosto del 2020.
Luego del incidente, Citigruop presentó la demanda en ese mismo mes buscando la devolución de los fondos, pero el fallo no le permitirá recuperar los millones de las 10 firmas de asesoría de inversiones.
El hecho ha sido considerado como una de las peores equivocaciones de la historia bancaria en Estados Unidos, y ha despertado escepticismo por lo sucedido.
El caso se originó cuando la compañía, actuando como agente de préstamos, transfirió 893 millones a Revlon, aparentemente para liquidar un préstamo cuyo vencimiento sería en 2023.
El gran problema se originó cuando un subcontratista hindú llamado Arokia Raj, encargado de llevar a cabo la transacción, cometiera el error fatal, presumiblemente por la confusa interfaz del software bancario.
Tres analistas revisaron la operación en el sistema y ninguno se percató la equivocación en la transacción; un día después, culparon al programa
La intención que tenía Citigroup era la de enviar un pago de intereses de 7,8 millones de dólares y por ello declaró que se trataba de un error humano.
Sentencia dictada
El juez federal Jesse Furman que llevaba el caso, dictaminó que las transferencias electrónicas realizadas por la financiera que actuaba como agente de préstamos de Revlon, eran “transacciones finales y completas, no sujetas a revocación”.
El juez en su decisión explicó que “la defensa de liquidación por valor en última instancia se basa en si los Demandados (o, más precisamente, sus clientes) recibieron un aviso constructivo del error de Citibank en el momento en que recibieron las transferencias electrónicas del 11 de agosto. Basado en el testimonio creíble de los empleados de los Demandados y el registro documental, la corte concluye que no fue así”.
Los prestamistas de la empresa de cosméticos Revlon, declararon que entendían que las transferencias de Citibank eran pagos anticipados de un préstamo pendiente que no debía liquidarse hasta 2023.
El juez argumentó que “la transferencia correspondía al centavo con la cantidad de capital e intereses pendientes del préstamo”, por lo que finalmente se dictaminó que era razonable que los prestamistas de Revlon asumieran que los pagos no fueron realizados por error.
Excepción en la Ley de Nueva York
Generalmente en la mayoría de los casos en que se reciben transferencias electrónicas por error, la ley obliga devolver el dinero al remitente o enfrentar cargos penales en caso de haberlos usado.
Sin embargo, la ley de Nueva York tiene excepciones a esta regla, conocida como «defensa de descarga por valor», que le permite al destinatario mantener los fondos transferidos accidentalmente cuando no se haya solicitado pero cubre una deuda válida y que no sea del conocimiento del destinatario que el pago se realizó por error.
En este caso, los prestamistas de Revlon alegaron que creían que Citibank estaba transfiriendo pagos anticipados de un préstamo, ya que el monto transferido accidentalmente correspondía a la cantidad exacta que Citibank les debía.
Benjamin Finestone, quien representó a dos prestamistas de Revlon, Brigade y HPS Investment Partners, expresó que estaban complacidos “con la decisión reflexiva, completa y detallada del juez Furman».
Por su parte, los representantes de Citigroup manifestaron tener la intención de apelar la decisión.