En la era digital, los ataques de denegación de servicio distribuido (DDoS) representan una de las amenazas más significativas para la seguridad de las empresas. Estos ataques pueden paralizar operaciones críticas, dañando la reputación y la eficiencia operativa de cualquier organización.
En torno a este tema, Diego Gómez, vicepresidente de ventas de Corero para toda Latinoamérica, excepto Brasil y México, subraya la relevancia de este tipo de protección: «Suele pasar que, desde ciertos países, una cantidad de máquinas a través de un botnet atacan una determinada URL o IP, produciendo que un banco quede fuera de línea. Esto impide que los clientes accedan a sus cuentas, afectando gravemente la reputación y operatividad del banco».
Un ataque DDoS busca sobrecargar los recursos de una empresa, haciendo que sus servicios en línea sean inaccesibles para los usuarios legítimos. Estos ataques pueden tener motivos económicos, políticos o incluso terroristas, y sus consecuencias son severas: reputación dañada, pérdida de clientes y problemas de eficiencia operativa.
«Nuestra empresa, desde hace 14 años, se dedica exclusivamente a prevenir ataques de denegación de servicio distribuido. Esto es, prevenir que las empresas tengan ataques que las dejen fuera de línea de sus operaciones en internet»
La tecnología avanzada detrás de Corero
Para enfrentar estos desafíos, Corero ha desarrollado tecnologías avanzadas que combinan inteligencia artificial y ciberinteligencia. Estas soluciones permiten una mitigación automatizada en tiempo real, adaptándose a las necesidades de cada cliente. Gómez lo resume de manera elocuente: «Somos neurocirujanos para este tipo de ataques, porque tenemos tecnología desarrollada con inteligencia artificial y ciberinteligencia, lo que nos permite estar un paso adelante de los ciberdelincuentes».
Además, Corero ofrece soluciones escalables y flexibles, ya sea en la nube, on-premise o en una configuración híbrida. Esto significa que su tecnología puede ser utilizada tanto por pequeñas empresas como por grandes corporaciones, adaptándose a sus necesidades específicas.
La prevención es la clave
El objetivo principal de Corero es prevenir los ataques antes de que causen daño. «Nuestra razón de ser es ser tu primera barrera de defensa. Si nosotros no logramos prevenir el ataque, no tendríamos razón de ser«, afirma Diego Gómez. Esta filosofía se refleja en la robustez de sus sistemas, diseñados para analizar y filtrar el tráfico en tiempo real, asegurando que solo el tráfico legítimo llegue a los servidores de sus clientes.
Gómez también menciona la importancia de estar siempre un paso adelante: «Los hackers usan la inteligencia artificial igual que nosotros, nuestro desafío es dar un paso adelante de los malos. Por eso somos líderes en nuestro mercado».
Ejemplos reales y la necesidad creciente de seguridad
La realidad de los ataques DDoS es palpable y creciente. Un caso reciente en Chile involucró un ransomware que dejó a muchos organismos del gobierno sin servicios durante casi dos meses. La empresa afectada tardó mucho en recuperarse, demostrando el alto costo reputacional y operativo de no estar adecuadamente protegidos.
«Hoy por hoy, cualquier empresa con servicios expuestos a internet es susceptible de requerir nuestros servicios», comenta Gómez. Desde comercios en línea hasta proveedores de servicios de transporte y logística, la necesidad de protección contra ataques DDoS es universal.
En conclusión, en un mundo donde los ataques cibernéticos son cada vez más frecuentes y sofisticados, contar con una protección avanzada y especializada como la que ofrece Corero es indispensable. «Nosotros prevenimos el ataque, somos la primer barrera de defensa», reafirma Diego Gómez. La ciberseguridad no es solo una necesidad, es una inversión esencial para proteger la reputación y la operatividad de cualquier empresa en la era digital.
Asegúrate de estar siempre un paso adelante y proteger tus activos más valiosos con soluciones avanzadas y confiables. La ciberseguridad no es opcional, es una obligación en la actualidad.