Google, reconocido como el motor de búsqueda de contenido más empleado en el mundo, anunció en el 2020 sus planes para poner fin a las cookies de terceros en su navegador Chrome
El camino está avanzado y de acuerdo a sus proyecciones, para el próximo año 2022 comenzará a bloquear la compatibilidad de las cookies de terceros, para de acuerdo a lo indicado “construir una web más privada” y “proteger a los usuarios”.
Recientemente la compañía adelantó ciertos pormenores de la nueva tecnología que vislumbra un cambio general para la publicidad digital.
¿Qué son cookies de Internet?
Una cookie o galleta informática es una pequeña información que los sitios web envían y almacenan en el navegador del usuario para situar publicidad personalizada de acuerdo a las preferencias y al historial de navegación, pero también pueden recoger datos técnicos e información clave.
Las cookies sirven para que los sitios recuerden información sobre las visitas, el idioma de preferencia, los registros de servicios, configuración de anuncios e incluso para contabilizar las visitas de una página y para cálculos estadísticos.
Sin embargo, sus implicaciones van más allá de lo esperado porque pueden acceder a direcciones, contraseñas, teléfonos, dirección IP, entre otros. Además se distinguen entre las cookies propias generadas por la web visitada o la de terceros proveniente de una página externa.
De allí la importancia de tener mayor cuidado en las páginas que se consultan y al momento de aceptarlas o no. Por ejemplo, las leyes de la Unión Europea (UE) exigen que las páginas web brinden información sobre las cookies que utilizan y que se usen previo consentimiento del usuario.
De acuerdo con un reporte del Instituto Reuters de la Universidad de Oxford, con la aplicación del Reglamento General de Protección de Datos de la Unión Europea (UE) en el año 2018, se logró reducir el número de cookies utilizados y se detectó que entre abril y julio de ese mismo año, el uso de cookies de rastreo cayó un 22 por ciento en 200 sitios web de siete países (Finlandia, Francia, Alemania, Italia, Polonia, España y el Reino Unido).
Propuesta de Google con Privacy Sandbox
Privacy Sandbox es la nueva propuesta de Google para marcar una política de privacidad en la publicidad digital. Consiste en el desarrollo de estándares abiertos para procurar la privacidad al mostrar anuncios.
Google plantea que bajo esta tecnología los anunciantes podrán acceder a una información general del usuario pero no tendrán acceso a sus datos personales resguardando su anonimato.
Esta iniciativa surge ante un contexto donde los usuarios exigen cada vez mayor privacidad y transparencia sobre el uso de sus datos personales en Intenet.
Aunque buscadores alternos como Safari y Firefox ya han implementado acciones parecidas, de acuerdo a las cifras suministradas por el proveedor de analítica web Statcounter, el 65% de los usuarios a nivel mundial navegan en Chrome lo que la hace líder en el área y sus acciones tendrán mayores repercusiones en el modelo actual de publicidad digital.
Dos caras de una misma moneda
Al informar sobre las intenciones de promover la privacidad y los avances adelantados, Google también aclaró que desarrolla nuevos métodos de monitorización de la navegación en Chrome para no desestimar la publicidad relevante y mantener la privacidad de los usuarios.
Para algunos especialistas y críticos en la materia en este contexto existen 2 caras de la misma moneda, y se intenta monopolizar o marcar un liderazgo contundente en la generación y uso de los datos de los usuarios.
Todo parece indicar que la publicidad digital tomará nuevos rumbos con un enfoque hacia el desarrollo de estrategias entre varios socios, un ecosistema donde Google estará a la cabeza. Sin importar desde los ojos en que se mire, éste será un gran avance ya que se implementarán ciertos controles que evitarán que nuestra privacidad sea violentada por terceros, aunque estemos a expensas a un control del gigante tecnológico.